Cual es errónea Luminoso o Luminozo?
La palabra correcta es Luminoso. Sin Embargo Luminozo se trata de un error ortográfico.
El Error ortográfico detectado en el termino luminozo es que hay un Intercambio de las letras s;z con respecto la palabra correcta la palabra luminoso
Más información sobre la palabra Luminoso en internet
Luminoso en la RAE.
Luminoso en Word Reference.
Luminoso en la wikipedia.
Sinonimos de Luminoso.
Errores Ortográficos típicos con la palabra Luminoso
Cómo se escribe luminoso o luminozo?
Algunas Frases de libros en las que aparece luminoso
La palabra luminoso puede ser considerada correcta por su aparición en estas obras maestras de la literatura.
En la línea 1667
del libro La Barraca
del afamado autor Vicente Blasco Ibañez
... Y, al fin, dormíase con el propósito de deshacer al día siguiente todo el mal causado, de ir por la mañana a ofrecerse a la familia, a llorar sobre el pobre niño; y entre las nieblas del sueño creían ver a Pascualet, blanco y luminoso como un ángel, mirando con ojos de reproche a los que tan duros habían sido con él y su familia. ...
En la línea 909
del libro La Bodega
del afamado autor Vicente Blasco Ibañez
... El sol siguió brillando, pero pareció menos luminoso a la humanidad, como si entre ella y el astro se interpusiera un velo fúnebre. La naturaleza continuó su obra creadora, insensible a las locuras de los hombres; pero éstos no amaron otras flores que las que transparentaban la luz en las vidrieras de las ojivas, ni admiraron más árboles que las palmeras de piedra que sostenían las bóvedas de las catedrales. Venus ocultó sus desnudeces de mármol en las ruinas del incendio, esperando renacer tras un sueño de siglos, bajo el arado del rústico. El tipo de belleza fue la virgen infecunda y enferma, enflaquecida por el ayuno; la religiosa, pálida y desmayada como el lirio que sostenían sus manos de cera, con los ojos lacrimosos, agrandados por el éxtasis y el dolor de ocultos cilicios. ...
En la línea 101
del libro Viaje de un naturalista alrededor del mundo
del afamado autor Charles Darwin
... Un escarabajo, el piróforo de pico de fuego (Pyrophorus luminosas), es el insecto luminoso más común en los alrededores de Bahía. En este insecto, como en otros varios que ya hemos citado, una irritación mecánica produce el efecto de hacer más intensa su luz. Divertíame un día en observar a este insecto, contemplando la facultad que tiene de dar grandes saltos, facultad que no me parece haberse descrito perfectamente4. Cuando el piróforo de pico de fuego está tumbado de espaldas y se prepara a saltar, echa atrás la cabeza y el tórax de tal suerte, que la espina pectoral se tiende y descansa en el borde su vaina. El insecto continúa este movimiento hacia atrás, empleando toda su energía muscular, hasta que la espina pectoral se atiranta como un resorte; en ese momento, el insecto descansa sobre el extremo de la cabeza y de los élitros. De pronto, se deja ir; la cabeza y el tórax se elevan, y a consecuencia de ello, la base de los élitros golpea con tanta fuerza en la superficie sobre la cual está, que bota hasta la altura de una o dos pulgadas. Los puntos avanzados del tórax y la vaina de la espina sirven para sostener el cuerpo entero durante el salto. En las descripciones que he leído, paréceme que no se ha fijado nadie lo suficiente en la elasticidad de la espina; un salto tan brusco no puede ser efecto de una simple contracción muscular, sin el auxilio de algún medio mecánico. ...
En la línea 131
del libro Viaje de un naturalista alrededor del mundo
del afamado autor Charles Darwin
... Otra noche nos es dado presenciar una magnífica función de fuegos artificiales; naturales: el tope del palo y los extremos de las vergas brillaban con el fuego de San Telmo; casi podíamos distinguir la forma de la veleta, que parecía como si la hubiesen frotado con fósforo. El mar estaba tan luminoso, que los Pájaros bobos parecían dejar detrás de sí en su superficie un reguero de luz, y de vez en cuando las profundidades del cielo se iluminaban de pronto al fulgor de un magnífico relámpago. ...
En la línea 543
del libro Viaje de un naturalista alrededor del mundo
del afamado autor Charles Darwin
... Dos veces he tenido ocasión de observar fosforescencias procedentes de grandes profundidades bajo la superficie del mar. Cerca de la desembocadura del Plata he visto algunas manchas circulares y ovales de dos a cuatro metros de diámetro con bordes definidos y que emitían una luz pálida pero continua, mientras que el agua circundante no daba sino algunos destellos. El aspecto general de estas manchas recordaba mucho la reflexión de la luna o de otro cuerpo luminoso, porque las ondulaciones de la superficie hacían los bordes sinuosos. El buque, que calaba trece pies, pasó por encima de estos puntos brillantes sin alterarlos en lo más mínimo. Debemos, pues, suponer que a mayor profundidad de la que alcanzaba la quilla del barco se habían reunido cierto número de animales. ...
En la línea 545
del libro Viaje de un naturalista alrededor del mundo
del afamado autor Charles Darwin
... Hubiera podido decirse que un gran pez nadaba rápidamente en medio de un fluido luminoso. Los marineros atribuyen, en efecto, esos relámpagos a está causa; pero desde luego no pudo satisfacerme esta explicación a causa del número y de la rapidez de los centelleos. Ya he asegurado que este fenómeno se produce con mucha mayor frecuencia en los países cálidos que en los fríos; y he pensado que una perturbación eléctrica considerable en la atmósfera favorecía mucho su producción. Creo en verdad que el mar es más luminoso después que el tiempo permanece algunos días seguidos en calma; siendo indudable que durante esas calmas nadan en la superficie mayor número de animales. El agua cargada de partículas gelatinosas se encuentra en estado de impureza y se produce el aspecto luminoso en todos los casos ordinarios por la agitación del fluido en contacto con la atmósfera; me inclino mucho a creer que la fosforescencia es el resultado de la descomposición de las partículas orgánicas, procedimiento (tentado estoy casi a darle el nombre de respiración) que purifica el océano. ...
En la línea 6981
del libro La Regenta
del afamado autor Leopoldo Alas «Clarín»
... Sobre la sierra, cuyo perfil señalaba una faja de vapor tenue y luminoso, brillaban las estrellas del carro, la Osa mayor, y Aldebarán, por la parte del Corfín, casi rozando la cresta más alta de la cordillera obscura, lucía solitario en una región desierta del cielo. ...
En la línea 1547
del libro El paraíso de las mujeres
del afamado autor Vicente Blasco Ibáñez
... Gillespie oyó un silbido, viendo al mismo tiempo ondular en el espacio un serpenteo luminoso semejante a un relámpago blanco. Acababan de arrojar sobre el uno de aquellos cables de platino de los cuales no podía defenderse. Pero echó atrás la cabeza, y el brillante hilo pasó sin tocarle, retorciéndose y doblando su extremo hacia arriba, como una serpiente furiosa. ...
En la línea 1710
del libro El paraíso de las mujeres
del afamado autor Vicente Blasco Ibáñez
... Después, dando una cabriola sobre el obstáculo de diez años, se contempló entre varios niños hermosos, bien vestidos y de una gracia conmovedora, iguales a los que se muestran en los escenarios de los teatros y en el lienzo luminoso de los cinemas. ...
En la línea 5964
del libro Fortunata y Jacinta
del afamado autor Benito Pérez Galdós
... Por la tarde llegó doña Lupe muy alarmada buscando a Maximiliano, a quien suponía allí. No pasó de la sala, ni quiso ver a Fortunata, de quien dijo que la compadecía, pero que no podía tener ninguna clase de relaciones con ella. En la sala cuchicheó la ministra con Segismundo contándole lo ocurrido. Pues ahí era nada: Maximiliano había comprado un revólver… ¿pero quién diablos le dio el dinero? Descubriolo la señora por una casualidad… Le dio el olor, al verle entrar con un bulto entre papeles. Lo peor del caso fue que no pudo quitárselo. Salió escapado de la casa, y al poco rato los del herrero del bajo vinieron diciendo que le habían visto en la Ronda, pegando tiros contra la tapia de la fábrica del Gas, como para ejercitarse… ¡Ay!, la de los Pavos estaba aterrada. Toda aquella sabiduría lógica, que el pobre chico tenía en la cabeza, se le había convertido en humo sin duda. Y lo peor era que no había ido a almorzar, ni se sabía su paradero… «Tenemos que dar parte a la policía, para evitar que haga cualquier barbaridad. Yo pensé que habría venido aquí, y corrí desolada… ¿Dónde demonios estará? Ballester, por Dios, averígüelo usted y sáqueme de este conflicto. Usted es la única persona que le domina cuando se pone así… Salga a ver si le encuentra; yo se lo ruego». A esto replicó el buen farmacéutico que no podía repicar y andar en la procesión. Fuese la de Jáuregui desconsoladísima, con intento de ver al Sr. de Torquemada, faro luminoso que le marcaba el puerto en todas las borrascas de la vida. ...
En la línea 739
del libro Sandokán: Los tigres de Mompracem
del afamado autor Emilio Salgàri
... El punto luminoso se agrandaba rápidamente. Probablemente se trataba de un barco a vapor. ...
En la línea 740
del libro Sandokán: Los tigres de Mompracem
del afamado autor Emilio Salgàri
... La inquietud de Giro Batol aumentaba por momentos, tanto más que el punto luminoso parecía dirigirse directo hacia la canoa. Pronto sobre el farol blanco aparecieron otros dos: uno rojo y otro verde. ...
En la línea 1960
del libro Sandokán: Los tigres de Mompracem
del afamado autor Emilio Salgàri
... El pirata se volvió y se encontró frente a Yáñez que le señalaba un punto luminoso que corría sobre el mar. Era un crucero que se acercaba a toda velocidad; el viento llevaba hasta el parao el ritmo de las ruedas que batían las olas. ...
En la línea 226
del libro Veinte mil leguas de viaje submarino
del afamado autor Julio Verne
... Ejecutadas estas órdenes, la fragata se alejó rápidamente del foco luminoso. Digo mal, quiso alejarse, hubiera debido decir, pues la bestia sobrenatural se le acercó con una velocidad dos veces mayor que la suya. ...
En la línea 247
del libro Veinte mil leguas de viaje submarino
del afamado autor Julio Verne
... Hacia las dos de la mañana reapareció con no menor intensidad el foco luminoso, a unas cinco millas a barlovento del Abraham Lincoln. A pesar de la distancia y de los ruidos del viento y del mar, se oían claramente los formidables coletazos del animal y hasta su jadeante y poderosa respiración. Se diría que en el momento en que el enorme narval ascendía a la superficie del océano para respirar, el aire se precipitaba en sus pulmones como el vapor en los vastos cilindros de una máquina de dos mil caballos. ...
En la línea 409
del libro Veinte mil leguas de viaje submarino
del afamado autor Julio Verne
... Había transcurrido ya casi media hora sin modificación alguna de la situación cuando nuestros ojos pasaron súbitamente de la más extremada oscuridad a la luz más violenta. Nuestro calabozo se iluminó repentinamente, es decir, se llenó de una materia luminosa tan viva que no pude resistir al pronto su resplandor. En su blancura y en su intensidad reconocí la iluminación eléctrica que producía en torno del barco submarino un magnífico fenómeno de fosforescencia. Reabrí los ojos que había cerrado involuntariamente y vi que el agente luminoso emanaba de un globo deslustrado, encajado en el techo de la cabina. ...
En la línea 593
del libro Veinte mil leguas de viaje submarino
del afamado autor Julio Verne
... Entré en un comedor, decorado y amueblado con un gusto severo. En sus dos extremidades se elevaban altos aparadores de roble con adornos incrustados de ébano, y sobre sus anaqueles en formas onduladas brillaban cerámicas, porcelanas y cristalerías de un precio inestimable. Una vajilla lisa resplandecía en ellos bajo los rayos que emitía un techo luminoso cuyo resplandor mitigaban y tamizaban unas pinturas de delicada factura y ejecución. ...
Reglas relacionadas con los errores de s;z
Las Reglas Ortográficas de la S
Se escribe s al final de las palabras llanas.
Ejemplos: telas, andamos, penas
Excepciones: alférez, cáliz, lápiz
Se escriben con s los vocablos compuestos y derivados de otros que también se escriben con esta letra.
Ejemplos: pesar / pesado, sensible / insensibilidad
Se escribe con s las terminaciones -esa, -isa que signifiquen dignidades u oficios de mujeres.
Ejemplos: princesa, poetisa
Se escriben con s los adjetivos que terminan en -aso, -eso, -oso, -uso.
Ejemplos: escaso, travieso, perezoso, difuso
Se escribe con s las terminaciones -ísimo, -ísima.
Ejemplos: altísimo, grandísima
Se escribe con s la terminación -sión cuando corresponde a una palabra que lleva esa letra, o cuando otra palabra derivada lleva -sor, -sivo, -sible,-eso.
Ejemplos: compresor, compresión, expreso, expresivo, expresión.
Se escribe s en la terminación de algunos adjetivos gentilicios singulares.
Ejemplos: inglés, portugués, francés, danés, irlandés.
Se escriben s con las sílabas iniciales des-, dis-.
Ejemplos: desinterés, discriminación.
Se escribe s en las terminaciones -esto, -esta.
Ejemplos: detesto, orquesta.
Las Reglas Ortográficas de la Z
Se escribe z y no c delante de a, o y u.
Se escriben con z las terminaciones -azo, -aza.
Ejemplos: pedazo, terraza
Se escriben con z los sustantivos derivados que terminan en las voces: -anza, -eza, -ez.
Ejemplos: esperanza, grandeza, honradez
La X y la S
Te vas a reir con las pifia que hemos hemos encontrado cambiando las letras s;z

El Español es una gran familia

la Ortografía es divertida
Palabras parecidas a luminoso
La palabra responsabilidad
La palabra alcanzaba
La palabra protestaba
La palabra saltando
La palabra tampoco
La palabra protestaron
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