Cual es errónea Campanilla o Sampanilla?
La palabra correcta es Campanilla. Sin Embargo Sampanilla se trata de un error ortográfico.
El Error ortográfico detectado en el termino sampanilla es que hay un Intercambio de las letras c;s con respecto la palabra correcta la palabra campanilla
Más información sobre la palabra Campanilla en internet
Campanilla en la RAE.
Campanilla en Word Reference.
Campanilla en la wikipedia.
Sinonimos de Campanilla.
Errores Ortográficos típicos con la palabra Campanilla
Cómo se escribe campanilla o sampanilla?
Cómo se escribe campanilla o campaniya?

la Ortografía es divertida
Te vas a reir con las pifia que hemos hemos encontrado cambiando las letras c;s
Reglas relacionadas con los errores de c;s
Las Reglas Ortográficas de la S
Se escribe s al final de las palabras llanas.
Ejemplos: telas, andamos, penas
Excepciones: alférez, cáliz, lápiz
Se escriben con s los vocablos compuestos y derivados de otros que también se escriben con esta letra.
Ejemplos: pesar / pesado, sensible / insensibilidad
Se escribe con s las terminaciones -esa, -isa que signifiquen dignidades u oficios de mujeres.
Ejemplos: princesa, poetisa
Se escriben con s los adjetivos que terminan en -aso, -eso, -oso, -uso.
Ejemplos: escaso, travieso, perezoso, difuso
Se escribe con s las terminaciones -ísimo, -ísima.
Ejemplos: altísimo, grandísima
Se escribe con s la terminación -sión cuando corresponde a una palabra que lleva esa letra, o cuando otra palabra derivada lleva -sor, -sivo, -sible,-eso.
Ejemplos: compresor, compresión, expreso, expresivo, expresión.
Se escribe s en la terminación de algunos adjetivos gentilicios singulares.
Ejemplos: inglés, portugués, francés, danés, irlandés.
Se escriben s con las sílabas iniciales des-, dis-.
Ejemplos: desinterés, discriminación.
Se escribe s en las terminaciones -esto, -esta.
Ejemplos: detesto, orquesta.

El Español es una gran familia
Algunas Frases de libros en las que aparece campanilla
La palabra campanilla puede ser considerada correcta por su aparición en estas obras maestras de la literatura.
En la línea 6029
del libro Los tres mosqueteros
del afamado autor Alejandro Dumas
... El tiempo pasa de prisa cuando se pasa en ataques y defensasSonó la medianoche y se oyó casi al mismo tiempo sonar la campanilla en la habitación de Milady. ...
En la línea 6306
del libro Los tres mosqueteros
del afamado autor Alejandro Dumas
... Apenas se había acurrucado en él cuando se dejó oír la campanilla. ...
En la línea 6679
del libro Los tres mosqueteros
del afamado autor Alejandro Dumas
... Justo a tiempo, Milady había hecho ya sonar la campanilla y despertado a t odo al palacio. ...
En la línea 6744
del libro Los tres mosqueteros
del afamado autor Alejandro Dumas
... Y tiró de la campanilla. ...
En la línea 6299
del libro La Biblia en España
del afamado autor Tomás Borrow y Manuel Azaña
... Maravilla será que aún estés vivo, amigo Manuel; tú, de condición natural tan noble, honrado, de corazón puro, humilde, pero digno, ¿vagas todavía por los patios de la bella _Safacoro_, o por la margen del _Len Baro_, con la mirada perdida en el espacio y esforzándote por recordar alguna copla de Luis Lobo medio olvidada? ¿O descansas ya, fuera de la _Puerta de Jerez_, en el _Camposanto_, adonde en tiempo de epidemia acostumbrabas llevar a tantos, así gitanos como gentiles, en tu carro de tintineante campanilla? Muchas veces en las _réunions_ de los sabios y escritores de este país de tantas letras, harto de sus alardes de pedantería y egotismo, he recordado gustoso nuestros recitados de poesías gitanas en la casona de Pila Seca. ...
En la línea 7011
del libro La Biblia en España
del afamado autor Tomás Borrow y Manuel Azaña
... Tras de media hora de conversación, en extremo agradable e instructiva para mí, manifesté el deseo de marcharme a mi alojamiento; tocó la campanilla, entró el mismo criado judío que me había recibido, y el cónsul le dijo en inglés: —Acompañe a este caballero a casa de Juana Correa, la viuda mahonesa, y encárguele de mi parte que le cuide bien y atienda a su regalo; si lo hace así, me confirmará en la buena opinión que tengo de ella y aumentará mi inclinación a favorecerla. ...
En la línea 1473
del libro Viaje de un naturalista alrededor del mundo
del afamado autor Charles Darwin
... No creo, sin embargo, que ese sentimiento de afecto tenga carácter individual; paréceme que cualquiera otro animal que llevase campanilla podría servir de madrina. ...
En la línea 1669
del libro Viaje de un naturalista alrededor del mundo
del afamado autor Charles Darwin
... 6 de abril.- Observamos al despertar que un ladrón se ha llevado una de nuestras mulas y la campanilla de la madrina. recorremos más que dos o tres millas por el valle y pasamos un día entero con la esperanza de recuperarla, que estará oculta en alguna quebrada, según el arriero. paisaje ha tomado el aspecto chileno; en verdad, es más agradable ver la base de las montañas adornada con el quillay, árbol de hojas persistentes de color verde pálido, y del gran cactus en forma de cirio, que encontrarse en los desolados valles de la vertiente oriental; pero yo no participo de la admiración de muchos viajeros. que sobre todo agrada, creo, es la esperanza de un buen fuego y una buena comida, después del frío que acaba de pasarse atravesando la montaña; esto es en lo que yo estoy en un todo conforme. ...
En la línea 4600
del libro La Regenta
del afamado autor Leopoldo Alas «Clarín»
... ? ¡Petra! ¡Anselmo! —y se colgó del cordón de la campanilla. ...
En la línea 12603
del libro La Regenta
del afamado autor Leopoldo Alas «Clarín»
... Sonó la campanilla de la puerta. ...
En la línea 222
del libro El Señor
del afamado autor Leopoldo Alas «Clarín»
... En los Cuatro Cantones Juan vio una esperanza: si la campanilla seguía de frente, bajando por la calle de Platerías, bueno; si tiraba a la derecha, también; pero si tomaba la izquierda. ...
En la línea 1241
del libro Fortunata y Jacinta
del afamado autor Benito Pérez Galdós
... —Pero mujer… Déjame, voy a tirar de la campanilla. ...
En la línea 1858
del libro Fortunata y Jacinta
del afamado autor Benito Pérez Galdós
... Cuando doña Lupe llamó a la puerta, su sobrino le abrió, y pasmose ella de que estuviera en pie todavía. «¡Qué despabilado está el tiempo!» dijo la señora con cierto retintín, que hizo estremecer al joven, limpiando súbitamente su espíritu de toda idea de independencia, como se limpia de sombras un farol cuando aparece dentro de él la llama del gas. Al oír la campanilla, acudió la chica dando traspiés y restregándose los ojos. Doña Lupe no dijo más que: «a la cama todo Cristo». Era muy tarde y Papitos tenía que madrugar. El sobrino y la cocinerita entraron sin hacer ruido en sus respectivas madrigueras, como los conejos cuando oyen los pasos del cazador. ...
En la línea 2084
del libro Fortunata y Jacinta
del afamado autor Benito Pérez Galdós
... Oyose la campanilla, y la misma doña Lupe abrió a su sobrino. Lo mismo fue entrar este en el comedor que conocer en la cara impertinente de su hermano que ya sabía aquello… No le dio Nicolás tiempo a prepararse, porque de buenas a primeras le embocó de este modo: ...
En la línea 2289
del libro Fortunata y Jacinta
del afamado autor Benito Pérez Galdós
... Llegaron por fin al convento. En la puerta había dos o tres mendigas viejas, que pidieron limosna, y a Maximiliano le faltó tiempo para dársela. Le amargaba extraordinariamente la boca, y su voz ahilada salía de la garganta con interrupciones y síncopas como la de un asmático. Su turbación le obligaba a refugiarse en los temas vulgares… «¡Vaya que son pesados estos pobres!… Parece que hay misa, porque se oye la campanilla de alzar… Es bonita la casa, y alegre, sí señor, alegre». ...
En la línea 22
del libro Crimen y castigo
del afamado autor Fyodor Mikhailovich Dostoyevsky
... Llamó a la puerta de la vieja. La campanilla resonó tan débilmente, que se diría que era de hojalata y no de cobre. Así eran las campanillas de los pequeños departamentos en todos los grandes edificios semejantes a aquél. Pero el joven se había olvidado ya de este detalle, y el tintineo de la campanilla debió de despertar claramente en él algún viejo recuerdo, pues se estremeció. La debilidad de sus nervios era extrema. ...
En la línea 523
del libro Crimen y castigo
del afamado autor Fyodor Mikhailovich Dostoyevsky
... Luego miró en todas direcciones y comprobó que el hacha estaba en su sitio. Seguidamente se preguntó: «¿No estaré demasiado pálido… , demasiado trastornado? ¡Es tan desconfiada esa vieja! Tal vez me convendría esperar hasta tranquilizarme un poco.» Pero los latidos de su corazón, lejos de normalizarse, eran cada vez más violentos… Ya no pudo contenerse: tendió lentamente la mano hacia el cordón de la campanilla y tiró. Un momento después insistió con violencia. ...
En la línea 525
del libro Crimen y castigo
del afamado autor Fyodor Mikhailovich Dostoyevsky
... Aplicó de nuevo el oído a la puerta y… ¿Sería que sus sentidos se habían agudizado en aquellos momentos (cosa muy poco probable), o el ruido que oyó fue perfectamente perceptible? De lo que no le cupo duda es de que percibió que una mano se apoyaba en el pestillo, mientras el borde de un vestido rozaba la puerta. Era evidente que alguien hacía al otro lado de la puerta lo mismo que él estaba haciendo por la parte exterior. Para no dar la impresión de que quería esconderse, Raskolnikof movió los pies y refunfuñó unas palabras. Luego tiró del cordón de la campanilla por tercera vez, sin violencia alguna, discretamente, con objeto de no dejar traslucir la menor impaciencia. Este momento dejaría en él un recuerdo imborrable. Y cuando, más tarde, acudía a su imaginación con perfecta nitidez, no comprendía cómo había podido desplegar tanta astucia en aquel momento en que su inteligencia parecía extinguirse y su cuerpo paralizarse… Un instante después oyó que descorrían el cerrojo. ...
En la línea 590
del libro Crimen y castigo
del afamado autor Fyodor Mikhailovich Dostoyevsky
... «Debe de ser un hombre alto y grueso», pensó Raskolnikof llevando la mano al mango del hacha. Verdaderamente, todo aquello parecía un mal sueño. El desconocido tiró violentamente del cordón de la campanilla. ...
En la línea 665
del libro Un viaje de novios
del afamado autor Emilia Pardo Bazán
... Encogiose Artegui de hombros como aquel que se resigna, y tiró del cordón de la campanilla. Cuando un cuarto de hora después entró el camarero con la bandeja, ardía el fuego más que nunca claro y regocijado, y las dos butacas, colocadas a ambos lados de la chimenea, y el velador cubierto de níveo mantel, convidaban a la dulce intimidad del almuerzo. Brillaban las limpias copas, las garrafas, la salvilla, las vinagreras, el aro de plata del mostacero: los rábanos, nadando en fina concha de porcelana, parecían capullos de rosa; el lenguado frito presentaba su dorado lomo, donde se destacaba el oro pálido de las ruedas de limón, y el verde chamuscado de las ramas de perejil; los bisteques reposaban sangrientos en lago de liquida manteca; y en las transparentes copas de muselina destellaba el intenso granate del Borgoña y el rubio topacio del Chateau-Iquem. Al entrar y salir; al dejar cada plato, o recogerlo, reíase el camarero, para su sayo, de la enamorada pareja española, que quería habitación aparte, para luego almorzar así, mano a mano, al halago de la lumbre. A fuer de francés de raza, el sirviente aprovechaba la situación, subiendo el gasto. Había presentado a Artegui la lista de los vinos, y se permitía indicaciones y consejos. ...
Palabras parecidas a campanilla
La palabra creerlo
La palabra aplaudiendo
La palabra dirigidas
La palabra preocupa
La palabra impide
La palabra quie
La palabra rival
Webs amigas:
VPO en Huesca . Ciclos Fp de Administración y Finanzas en Zamora . Guia Sierra Nevada . - Apartamentos en Benalmádena jardines del Gamonal