La palabra Sueldos ha sido usada en la literatura castellana en las siguientes obras.
La Barraca de Vicente Blasco Ibañez
Memoria De Las Islas Filipinas. de Don Luis Prudencio Alvarez y Tejero
La Biblia en España de Tomás Borrow y Manuel Azaña
Fantina Los miserables Libro 1 de Victor Hugo
Por tanto puede ser considerada correcta en Español.
Puedes ver el contexto de su uso en libros en los que aparece sueldos.
Estadisticas de la palabra sueldos
Sueldos es una de las 25000 palabras más comunes del castellano según la RAE, en el puesto 7623 según la RAE.
Sueldos aparece de media 10.99 veces en cada libro en castellano.
Esta es una clasificación de la RAE que se basa en la frecuencia de aparición de la sueldos en las obras de referencia de la RAE contandose 1671 apariciones .
Más información sobre la palabra Sueldos en internet
Sueldos en la RAE.
Sueldos en Word Reference.
Sueldos en la wikipedia.
Sinonimos de Sueldos.

la Ortografía es divertida
Algunas Frases de libros en las que aparece sueldos
La palabra sueldos puede ser considerada correcta por su aparición en estas obras maestras de la literatura.
En la línea 716
del libro La Barraca
del afamado autor Vicente Blasco Ibañez
... Sin abandonar su asiento, los jueces juntaban sus cabezas como cabras juguetonas, cuchicheaban sordamente algunos segundos, y el más viejo, con voz reposada y solemne, pronunciaba la sentencia, marcando las multas en libras y sueldos, como si la moneda no hubiese sufrido ninguna transformación y aún fuese a pasar por el centro de la plaza el majestuoso justicia, gobernador popular de la Valencia antigua, con su gramalla roja y su hierática escolta de caballeros de la pluma. ...
En la línea 737
del libro La Barraca
del afamado autor Vicente Blasco Ibañez
... -¡Cuatre sous de multa! (¡Cuatro sueldos de multa!) -dijo el presidente. ...
En la línea 756
del libro La Barraca
del afamado autor Vicente Blasco Ibañez
... -Pagará el Batiste Borrull dos lliures de pena y cuatre sous de multa (Pagará el Bautista Borrull dos libras como pena y cuatro sueldos de multa). ...
En la línea 803
del libro La Barraca
del afamado autor Vicente Blasco Ibañez
... Y encima de esta desdicha, todo el rosario condenado de libras y sueldos de multa, ¡Cristo! Comió sin apetito, contando a su mujer lo ocurrido en el Tribunal. ...
En la línea 161
del libro Memoria De Las Islas Filipinas.
del afamado autor Don Luis Prudencio Alvarez y Tejero
... Es cosa sabida y que todos conocen ser muy fácil reducir el sistema administrativo de hacienda á un método breve y de toda claridad en cualquier estado, como por ejemplo, en Filipinas, donde con recursos el gobierno para tener al corriente todas sus cargas, no debia haber cuentas atrasadas, ni deudas de ninguna clase, lo cual es indudable facilita y abrevia el sistema de contabilidad, disminuye trabajos, y sin disputa la cuenta y razon debe marchar por un camino mas corto y despejado, con ahorro considerable de manos ocupadas en este ramo: pues cabalmente en Filipinas hace algun tiempo parece no se ha tratado sino de complicar mas y mas este ramo, multiplicando empleados, aumentando sueldos, y proponiéndose cada dia nuevos planes, sin que de ninguno haya resultado otro beneficio que gravar el tesoro público, y retardar el curso y despacho de los negocios [20]. ...
En la línea 177
del libro Memoria De Las Islas Filipinas.
del afamado autor Don Luis Prudencio Alvarez y Tejero
... Aqui es donde precisamente es indispensable dispensar al autor de esta memoria, como suplica, toda induljencia por protestar como lo hace que su ánimo no es lastimar en lo mas mínimo el carácter, concepto y opinion de ningun empleado en particular; pues su plan solo se reduce á manifestar el impulso que las rentas podrian tener, é indicar que con el aumento progresivo de empleados que han tenido aquellas oficinas de veinte años acá, si continúa, muy en breve no bastarán los ingresos del tesoro para satisfacer sueldos, pensiones, retiros y demas gravámenes con que se sobrecarga aquel erario, y se empobrece asi como al pais; por lo que es de necesidad atender con tiempo á este daño y cortarle, para no esponerse á esperimentar las funestas consecuencias que pudiera traer, y que pocos habrá dejen de conocerlas. ...
En la línea 183
del libro Memoria De Las Islas Filipinas.
del afamado autor Don Luis Prudencio Alvarez y Tejero
... Por otra parte, de esa abundancia de empleados tan innecesaria y que grava al tesoro público, resultan otros daños de no menor consideracion: tales son el cúmulo de jente desocupada que tan poco favorece al público sosiego; que existiendo siempre en todas las oficinas escedentes, agregados y supernumerarios para una vacante que ocurre, hay ciento á quien colocar de efectivos, con notorio perjuicio de la escala y de los beneméritos hijos de los españoles, que son tambien acreedores á que se les atienda segun su aptitud y mérito y antecedentes de sus padres, como demandan principios de política, de pública conveniencia y de rigurosa justicia: y por último, en esta parte es de decirse que si en la administracion de la hacienda pública ha de haber el buen órden que se debe observar y las posibles economías, mucho mas en los actuales tiempos de escasez y penuria por lo recargado del estado, ni uno ni otro se conseguirá aumentando empleados todos los dias, siempre innecesarios, y teniendo un número escesivo de agregados, que sobre perjudicar la escala de los de número, absorve sumas de entidad anualmente por los sueldos que disfrutan. ...
En la línea 215
del libro Memoria De Las Islas Filipinas.
del afamado autor Don Luis Prudencio Alvarez y Tejero
... Se queja, pues, con razon de que en ese acto abandonado á los aforadores, hay mas bien falta de imparcialidad y de buena fe, que de intelijencia, y de consiguiente se remediarian los abusos en el recibo de la hoja del tabaco, nombrándose cada año, y en el momento de la necesidad, nuevos empleados de otra esfera, que por espresa comision pasen de Manila á las provincias al reconocimiento y recibo de la hoja, y cuya ilustracion é intelijencia pueda descubrir y destruir todas las artes y manejos que se empleasen en estos casos, y economizarse los sueldos de trecientos pesos anuales que se dan á los titulados alumnos de aforadores, creados pocos años hace con el fin de que instruyéndose en el cargo de aforadores, sirvan al caso á la renta cuando sea necesario; pero esta medida sola no llena el objeto en la forma establecida, porque viven entre los cosecheros, están con ellos en estrechas relaciones, y no puede de este modo conseguirse el fin de procurar evitar fraudes; ademas de que pueden economizarse los pesos que se invierten en sus sueldos. ...
En la línea 4316
del libro La Biblia en España
del afamado autor Tomás Borrow y Manuel Azaña
... La mitad de los habitantes de El Ferrol pide limosna; y dícese que no es raro encontrar entre ellos oficiales de marina retirados, muchos de ellos inválidos, a quienes se deja perecer en la indigencia, ya que, por la penuria de los tiempos, cobran sus sueldos y pensiones con tres o cuatro años de retraso. ...
En la línea 6533
del libro La Biblia en España
del afamado autor Tomás Borrow y Manuel Azaña
... Resultó que el marinero se había negado a trabajar, y se obstinaba en abandonar el barco; su jefe llevábale a presencia del cónsul, a fin de que, si persistía en su actitud, le notificasen las consecuencias, o sea la pérdida de sus sueldos y ropas. ...
En la línea 6536
del libro La Biblia en España
del afamado autor Tomás Borrow y Manuel Azaña
... B., buen conocedor, por lo visto, del carácter de los galeses en general—cuya testarudez, cuando se les lleva la contraria, es proverbial—y que desde luego vió los motivos triviales y necios de donde la disputa había surgido, le dijo sonriendo al marinero que, para salirse con la suya frente a todos y conservar sus sueldos y ropas, había un medio: irse a bordo de un barco de guerra de su majestad, anclado a la sazón en la bahía. ...
En la línea 186
del libro Fantina Los miserables Libro 1
del afamado autor Victor Hugo
... El viajero tomó los cuatro sueldos. ...
En la línea 216
del libro Fantina Los miserables Libro 1
del afamado autor Victor Hugo
... - Me llamo Jean Valjean: soy presidiario. He pasado en presidio diecinueve años. Estoy libre desde hace cuatro días y me dirijo a Pontarlier. Vengo caminando desde Tolón. Hoy anduve doce leguas a pie. Esta tarde, al llegar a esta ciudad, entré en una posada, de la cual me despidieron a causa de mi pasaporte amarillo, que había presentado en la alcaldía, como es preciso hacerlo. Fui a otra posada, y me echaron fuera lo mismo que en la primera. Nadie quiere recibirme. He ido a la cárcel y el carcelero no me abrió. Me metí en una perrera, y el perro me mordió. Parece que sabía quién era yo. Me fui al campo para dormir al cielo raso; pero ni aun eso me fue posible, porque creí que iba a llover y que no habría un buen Dios que impidiera la lluvia; y volví a entrar en la ciudad para buscar en ella el quicio de una puerta. Iba a echarme ahí en la plaza sobre una piedra, cuando una buena mujer me ha señalado vuestra casa, y me ha dicho: llamad ahí. He llamado: ¿Qué casa es ésta? ¿Una posada? Tengo dinero. Ciento nueve francos y quince sueldos que he ganado en presidio con mi trabajo en diecinueve años. Pagaré. Estoy muy cansado y tengo hambre: ¿queréis que me quede? ...
En la línea 231
del libro Fantina Los miserables Libro 1
del afamado autor Victor Hugo
... - Y quince sueldos -añadió el hombre. ...
En la línea 232
del libro Fantina Los miserables Libro 1
del afamado autor Victor Hugo
... - Ciento nueve francos y quince sueldos. ¿Y cuánto tiempo os ha costado ganar ese dinero? ...

El Español es una gran familia
Errores Ortográficos típicos con la palabra Sueldos
Cómo se escribe sueldos o zueldoz?
Busca otras palabras en esta web
Palabras parecidas a sueldos
La palabra cabras
La palabra asiento
La palabra callar
La palabra sous
La palabra pagaba
La palabra multa
La palabra turno
Webs Amigas:
Becas de Ciclos Formativos en Baleares . Ciclos formativos en Cadiz . Becas de Ciclos Formativos en País Vasco . - Calafetea Hotel Canada Palace